Bebés prematuros

Bebés prematuros: ¿qué debemos saber para cuidarlos bien en casa?

La llegada del bebé aportar gran alegría a la familia, pero al mismo tiempo, nos provoca un cúmulo de preguntas y situaciones que pueden resultar  estresantes en los primeros momentos. Especialmente si hablamos de bebés prematuros.

El nacimiento de bebés prematuros requiere de una serie de medidas y actuaciones para asegurar su correcto desarrollo y crecimiento.

 

Bebés prematuros

La situación puede resultar algo más dificultosa si además se presenta un nacimiento adelantado, acortándose el importante tiempo que precisa el feto para madurar sus órganos.

En España aproximadamente un 10% de los partos son prematuros, siendo aquel que se produce antes de las 37 semanas de gestación desde la última menstruación.

Cuanto más se adelante mayor es la inmadurez,  y conlleva mayor riesgo.

Es importante que los padres reciban la información suficiente y se involucren en los cuidados del recién nacido, tanto a nivel hospitalario como posteriormente en domicilio.

 

Los prematuros en casa

  • En el mismo momento del alumbramiento, el médico comprobará  que la adaptación del bebé al mundo exterior es adecuada.
  • Se secará y arropará para evitar la pérdida de calor y se comprobará que su respiración es normal.
  • Si el bebé es muy prematuro, quizá sea necesario que permanezca en observación en una incubadora.
  • Algunos de ellos necesitarán alimentación mediante una sonda o una vía, así como ayudarles con algún soporte respiratorio.
  • Los médicos al cuidado del recien nacido explicarán a los padres todo lo que necesitan para cuidad de su bebé y los padres deben confiar en ellos y sentir que están en buenas manos.
  • Se les hará participes en sus cuidados, facilitando la técnica ‘piel con piel’ y el método canguro (apoyarlos en el pecho de los padres), pues ayuda mucho que el bebé permanezcan entre sus brazos.
  • La madre puede necesitar ayuda para aprender a estimular la producción de la leche materna, la cual aportará muchas ventajas al bebé, tanto nutricionales, como para sus defensas y su neurodesarrollo…

 

El momento de volver a casa

Cuando el bebé ya no precisa de cuidados hospitalarios  y los padres son capaces de manejarse perfectamente con su hijo, llegará el momento de marchar a casa.

Algunas de las recomendaciones de los cuidados que deben realizar en el domicilio son:

  • Mantener la higiene: es muy importante que, para cualquier maniobra de manipulación del neonato, los padres se laven las manos con agua y jabón.
  • Respecto a las visitas, lo mejor es reducirlas al mínimo. No es aconsejable que el bebé circule de brazos en brazos  y  cualqueira que lo coja deberá observar la higiene de lavado de manos .
  • Alimentar al bebé: se intentará mantener la lactancia materna el mayor tiempo posible, dada las ventajas que aporta, más aún en el prematuro.
  • Vínculo: para el desarrollo primario del bebé es fundamental que reciba estímulos varios y, por tanto, que el contacto y relación con los padres sea frecuente.
  • Sueño: los recién nacidos duermen una cantidad de horas muy elevada, pero en el caso de los prematuros alcanzan niveles aún mayores, pudiendo llegar hasta las 20 horas diarias.
  • Seguimiento médico: cobra importancia el seguimiento durante los primeros meses de vida, asegurando una correcta ganancia de peso y observando que se adquieren los logros del desarrollo adecuados para cada edad.

 

Recuerda:

  • Los recién nacidos prematuros podrán necesitar algunos cuidados especiales en el hospital.
  • Los profesionales médicos os harán partícipes en el cuidado y os ayudarán en el manejo,  por lo que seréis capaces de realizarlos  en poco tiempo.
  • Los cuidados se basarán en mantener una correcta higiene, asegurar la alimentación y el sueño y proporcionar estímulos adecuados para el fomentar su desarrollo.