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¿Qué es la dieta hipocalórica y para qué sirve?

La dieta hipocalórica es una estrategia dietética que se puede emplear en el tratamiento de ciertas condiciones médicas, especialmente, en el entorno hospitalario. Esta dieta, que implica la reducción controlada de la ingesta calórica diaria, juega un papel fundamental en el manejo de diversos trastornos y enfermedades.

Una dieta hipocalórica se caracteriza por limitar la cantidad de calorías que se consumen diariamente, generalmente, a un nivel inferior al requerimiento calórico total del individuo. Esta restricción calórica puede variar dependiendo de los objetivos terapéuticos y las necesidades específicas del paciente.

¿Cuándo se indica una dieta hipocalórica?

Estos son algunos de los motivos por los que los especialistas pueden indicar una dieta hipocalórica en un paciente hospitalizado:

  • Abordaje del sobrepeso u obesidad: esta estrategia nutricional se prescribe con frecuencia en estos pacientes porque ayuda a reducir el peso corporal y sus riesgos asociados.
  • Preparación para procedimientos quirúrgicos: antes de someter a un paciente a ciertos procedimientos médicos o cirugías, se le puede prescribir esta dieta. El objetivo es reducir el tamaño del hígado y facilitar la intervención.
  • Cualquier caso en el que haya que controlar un número determinado de calorías.

 

En cualquier caso, los profesionales sanitarios pueden tener otros motivos por los que indicar una dieta hipocalórica a un paciente hospitalizado.

Características de una dieta hipocalórica

Ahora que conocemos qué es la dieta hipocalórica y en qué casos se indica, cabe señalar cuáles son sus características generales. Son las siguientes:

  • Alimentos: esta dieta está basada en alimentos bajos en calorías, pero ricos en nutrientes. Por ejemplo, verduras, frutas, proteínas magras (pollo, pavo o pescado), cereales integrales y lácteos bajos en grasa.
  • Preparación: estos alimentos suelen prepararse empleando técnicas culinarias como la cocción al vapor, a la plancha, al horno o en papillote. El objetivo es reducir el contenido de grasas y calorías.
  • Restricción de azúcares y grasas: en general, esta dieta limita el consumo de azúcares y añadidos, además de las grasas saturadas o hidrogenadas. Por ello, se opta por alimentos naturales y fuentes de grasas saludables como el aceite de oliva y los frutos secos.

 

Es importante recordar que cada paciente tiene necesidades y objetivos individuales, por lo que es fundamental seguir las recomendaciones específicas de los profesionales sanitarios.

Recuerda:

  • La dieta hipocalórica es una estrategia dietética que se emplea en algunos pacientes hospitalizados.
  • Se indica en pacientes con sobrepeso u obesidad o como preparación para procedimientos quirúrgicos, entre otros.
  • Esta dieta se caracteriza por incluir ricos en nutrientes restringiendo azúcares añadidos y grasas.