Dieta-absoluta-alimentacion

¿En qué casos se emplea la dieta absoluta?

La dieta absoluta es un régimen alimentario que implica la restricción completa de alimentos y líquidos. Se emplea en contextos muy específicos, principalmente en pacientes que van a someterse a una intervención quirúrgica o que se encuentran en posoperatorio.

Este tipo de dieta es una medida importante para la seguridad del paciente, pero su implementación debe ser supervisada por profesionales sanitarios. En este contexto, es importante tener en cuenta que la dieta absoluta debe ser limitada en el tiempo.

Objetivos y características de la dieta absoluta

La dieta absoluta se prescribe con un propósito claro: evitar complicaciones durante y después de la cirugía. La presencia de alimentos o líquidos en el estómago puede ser peligrosa durante la administración de anestesia, ya que aumenta el riesgo de vómitos o aspiración, una situación en la que el contenido gástrico entra en las vías respiratorias. Para evitarlo, los médicos piden que el paciente mantenga un ayuno de entre 6 y 8 horas previas a la operación, aunque este tiempo puede variar según la complejidad de la intervención.

Así, es importante informar al personal de enfermería y familiares sobre la prohibición de ofrecer al paciente cualquier tipo de líquido, comida o medicación por vía oral para evitar cualquier ingesta accidental.

Esta dieta es fundamental para las cirugías de alta complejidad, en especial las relacionadas con el sistema digestivo, como aquellas que involucran el esófago o el estómago.

Dieta líquida absoluta: una variante menos restrictiva

Una variante de la absoluta es la dieta líquida absoluta. Este régimen es menos restrictivo, pues permite la ingesta de ciertos líquidos claros. Está pensada para ofrecer una cantidad mínima de calorías, líquidos y electrolitos al paciente mientras se mantiene el sistema digestivo vacío. Es especialmente útil en pacientes que han tenido náuseas, vómitos o diarrea, pues facilita la digestión. La dieta líquida absoluta permite tomar:

  • Zumos claros (como de manzana o uva) sin pulpa.
  • Caldos o consomés desgrasados.
  • Té o café solo, sin leche ni crema.
  • Bebidas deportivas sin colorantes fuertes.
  • Agua.

 

No obstante, la dieta líquida absoluta sigue siendo limitada en cuanto a nutrientes, ya que no aporta todos los macronutrientes, vitaminas y minerales necesarios. Por ello, los profesionales sanitarios también la implementan por periodos cortos y cuando es absolutamente necesario.

Recuerda:

  • La dieta absoluta implica la restricción total de alimentos y líquidos y se utiliza, fundamentalmente, en pacientes pre y postquirúrgicos.
  • Su objetivo es proteger al paciente de complicaciones durante la anestesia, especialmente en cirugías digestivas de alta complejidad.
  • La dieta líquida absoluta, una variante menos restrictiva, permite únicamente la ingesta de líquidos claros.